Digamos las Cosas
Exhibición
2019
Galería CIMA presenta la exposición fotográfica “Digamos las Cosas” de Titae Lindl.
Es la primera vez que se expone en una galería de arte el registro fotográfico inédito del bajista del grupo Los Tres.. La selección de obras da cuenta de diversos episodios de la vida cotidiana y trayectoria musical de Titae en giras y eventos, situándonos frente a una nueva faceta y expresión de este conocido artista chileno, en el contexto y experiencia de Galería CIMA, en pleno centro de Santiago.
“Digamos las Cosas” es una muestra inédita de obras personales de Titae Lindl, curada por Trinidad Lopetegui y Sebastián Rojas, directores de Galería CIMA, junto a Daniel Aguayo, director de specific.studio. Un proyecto que busca mostrar la particular forma de ver el mundo, desde la mirada íntima de un artista conocido por la música, pero que en su larga afición por la fotografía, logró crear y reunir un numeroso e interesante registro de imágenes, nunca antes exhibidas, experiencia que lo traslada desde la categoría de músico consagrado a la de artista emergente.
La selección de obras se planteó como un ejercicio de relectura de recuerdos en medio de una gran riqueza de material visual, donde el descubrimiento de escenas, personajes y espacios, se fueron articulando a momentos y contextos llenos de detalles significativos, posibles de leer desde diversas perspectivas. De esta forma, la muestra se configura narrando historias, donde la música deja de ser evidente y nos sugiere circunstancias llenas de un imaginario extenso, a veces bizarro o cargadas de humor, pero que sin duda provoca al público llamando a la reflexión y al goce.
“Esta exposición es una reivindicación de la cotidianidad de tomar fotos y de que hay arte en eso también, en esa manera de expresarse, donde surgen cosas muy interesantes” comenta Titae acerca de la muestra, “La serie que se presenta es como un paso por estos 30 años de vida consciente que tengo. Comencé a tomar fotos a los 20 años. Son recuerdos irrepetibles y son super importantes”.
Una vez que se captura un momento en una fotografía, la temporalidad del recuerdo se traslada a la dimensión del objeto en que se transforma. En este caso negativos de 35 mm en blanco y negro que han permanecido como un secreto bien guardado en una maleta y que pocas veces han visto la luz.
De aquí nace esta exposición, como una voluntad de develar los recuerdos que Titae Lindl ha acumulado en 30 años de carrera musical, donde ha perpetuado distintos momentos de giras y viajes en las bandas que ha conformado.
Además del valor documental que podemos encontrar en su amplio registro, existe una selección de elementos que pertenecen a un imaginario que proviene de otro lugar, donde la música no es evidente, pero que nos lleva a descifrar una mente creativa desde otro ángulo para entender que los sentidos sí están ligados.
Este descubrimiento nos pone en el ejercicio de concebir la muestra como una relectura de recuerdos, donde varios son compartidos por quienes han sido parte de su vida, otros pertenecen a la memoria colectiva de una generación, pero al fin y al cabo son una colección de momentos particulares que reflejan una mirada honesta y desprejuiciada sobre las realidades y dimensiones donde se ha visto inmerso.
Titae no busca la foto, solo está atento a la cotidianidad, capturándola sin saber qué se va a revelar. Esa honestidad de reconocer el ocio dentro de una vida de ensayos, pataguales, aviones y hoteles, es la que le permite llevar la fotografía como un instrumento para capturar la entretención, entendiendo que lo que define una circunstancia es que nunca más se va a repetir. Éstas pueden estar dadas por la composición geométrica que genera la luz en el espacio, la aparición de algún símbolo fortuito en la ciudad o la presencia de un personaje sugerente que accione un momento determinado. Pero es la capacidad de capturar lo único, lo que transmite un relato extenso e intenso, a veces bizarro e irreal, algunas con humor y otras sólo de contemplación, que se presentan en esta exposición a modo de fotos únicas y series.
Digamos las cosas. Interpretemos y atrevámonos a sentirnos ridículos en una tertulia que nos transporte a mundos inconexos. Porque aquí las fotografías dejan de pertenecer al pasado y se transforman en una sugerencia estética de posibles realidades sin principio ni fin. Y para eso, no hay nada más cercano que la propia perspectiva para usarla como instrumento de navegación en territorios desconocidos, donde todo puede ser.
Equipo Curatorial
Daniel Aguayo
Sebastián Rojas
Trinidad Lopetegui